Una carrera entera con una única camiseta: la Celeste. Federico Slezack jugó el pasado fin de semana ante Cañuelas su último partido oficial en el Gennacio Sálice. Si bien su retiro se formalizará el lunes, cuando la Villa juegue ante Dock Sud, el domingo 27 de octubre el zaguero salió del campo unos minutos antes del final, para recibir el merecido premio del aplauso del hincha.
En conversación con los responsables de redes del Club, Slezack se refirió al cierre de esta etapa. “No lo digo por decir: esta es mi casa, en donde está mi familia. Es el lugar en el que pasé muchísimas cosas y por suerte pude despedirme de la mejor manera”, advirtió, indicando que si bien hubiera sido ideal retirarse en otro contexto, no está mal decir adiós al final de un partido en el que el equipo se garantizó la continuidad en la categoría, después de una durísima temporada.
“Hay que agradecer la paciencia, más allá de algunas situaciones que son normales por lo que pasamos este año. Es necesario agradecer el acompañamiento de siempre. Recibimos muchos mensajes de aliento en esta última semana. Tuvimos la desgracia de estar en las malas a lo largo de todo este año, pero es cuando hay que hacerse fuerte. El mensaje es ese: ante la adversidad, cuando las cosas no salen como esperamos, nos tenemos que unir como familia”, reflexionó, con un nudo en la garganta.
“Cuando estás en las malas, tenés que llamar al compañero de al lado, ver qué hace falta, acercarse a alentar. Criticar es fácil, pero el día a día en el Club es muy difícil. Hay que acercarse para ver qué hace falta, no solo a los jugadores, sino a la institución en general en cada actividad que realiza”, pronunció también el histórico zaguero celeste.
Emociones a flor de piel y con miles de imágenes cruzándole la cabeza, el baluarte del fondo villero ponderó el aprendizaje que recibió en la institución y aludió a su compromiso de cara al futuro. “Arranqué en el fútbol infantil y pude ver lo que representa la labor de los técnicos y de tanta gente que a veces sacrifica tiempo libre para estar con los chicos, incluso llevándose sus camisetas para lavar. Hay muchos valores en este Club y lo que aprendimos, tenemos que tratar de pasárselo a las generaciones que vienen”, afirmó.