Martes 25 de noviembre de 2025
vacunas

En una carta dirigida al ministro de Salud de la Nación, Mario Lugones, el Colegio de Médicos de la Provincia de Buenos Aires solicitó la suspensión de un evento previsto para este jueves en el Congreso, bajo el título “¿Qué contienen realmente las vacunas COVID-19? Perspectivas legales, políticas, económicas, genéticas e infectológicas”.

En la misiva que lleva la firma del presidente de la entidad, Rubén Tucci, se advierte que avalar este tipo de propuesta “puede provocar reticencia a vacunarse en la comunidad, o generar dudas respecto al valor de las vacunas”, lo que representaría “un enorme peligro”, teniendo en cuenta la notable baja en tasas de vacunación y la consecuente reaparición de enfermedades que habían estado absolutamente controladas como sarampión, tos convulsa, hepatitis A, y otras, que puede derivar en problemas sanitarios de peso.

Para el Colegio profesional, avalar este tipo de jornadas en el ámbito del Congreso “induce al negacionismo científico”. En tal sentido, se señaló que resulta imperioso continuar con el compromiso del país con la Salud Pública, reconociendo a las vacunas como bien fundamental para la comunidad, conforme lo garantiza la Ley de Vacunas (Ley 27.491).

Alerta a la población

Además, en un informe publicado en el portal institucional del Colegio se advirtió que la interrupción de los programas de vacunación generaría un retroceso sanitario global sin precedentes. “La falta de vacunas permitiría el resurgimiento inmediato de enfermedades como poliomielitis, sarampión, difteria, tos ferina y rubéola, hoy controladas gracias a décadas de inmunización”, aseguraron desde la entidad.

Según el documento, la pérdida de la inmunidad colectiva dejaría vulnerables a bebés, personas inmunocomprometidas y a quienes no desarrollan una respuesta adecuada a las vacunas, lo que provocaría un aumento drástico de casos graves, hospitalizaciones y muertes. “Esto llevaría rápidamente a la saturación de los sistemas de salud y afectaría la atención de otras patologías críticas”, sentenciaron referentes de la organización.

El impacto, añadieron, también alcanzaría al ámbito social y económico, pudiendo generar efectos como el cierre transitorio de escuelas, restricciones de viaje, caída del turismo y costos muy superiores a los requeridos para sostener los programas de vacunación. A su vez, la mayor circulación de virus y bacterias incrementaría el riesgo de nuevas variantes, potenciales pandemias y resistencia antimicrobiana.

“Abandonar la vacunación sería regresar a una época en la que las enfermedades infecciosas causaban muerte y discapacidad de manera habitual”, concluyeron integrantes de la mesa directiva de la institución, llamando a la población “a mantener y reforzar los esquemas de vacunación para proteger la salud individual y colectiva”.