El contexto económico dista a las claras de ser el ideal. Dispuesto a trazar un balance de su primer año al frente de la Comuna, el intendente Jorge Nedela intenta imaginar cómo hubiera sido gestionar en un Municipio al que no le faltaran recursos. Pero toma distancia de ‘lo que podría haber sido’ para apegarse a ‘lo que es’: una situación de crisis de la que, según evalúa, se saldrá con ‘tiempo y trabajo’.
De todas formas, asegura que el camino que se inició en diciembre del año pasado es el correcto y confía en que gradualmente serán más los berissenses que se convenzan ‘con hechos’ de lo mismo.
‘¿Qué pasaría si las elecciones fueran hoy?’, es el ejercicio propuesto. “Estoy convencido de que sacaríamos una diferencia mayor. La gente va notando que de a poco se van provocando cambios que eran necesarios. No es fácil revertir 32 años de una forma de actuar en la política berissense. Nos va a llevar un poco más de tiempo, pero confío en el respaldo de los vecinos”, sostiene.
Para Nedela, es necesario dimensionar que la ciudad ‘está viviendo algo inédito’, teniendo en cuenta que en toda su historia no había experimentado una situación de alternancia política en el gobierno.
Cuentas
El primer ítem al que pasar revista es el de los recursos con que cuenta el Municipio para funcionar. En ese plano, el jefe comunal explica que la deuda que venía arrastrándose al asumir era notable.
“Tuvimos que destrabar una difícil situación con proveedores, sobre todo porque era necesario para el funcionamiento diario del Municipio. Sin resolver el problema no podríamos contar con el repuesto para un camión, con oxígeno para las unidades sanitarias, o toner para áreas administrativas”, advierte, recordando que algunas de las deudas a afrontar incluso tenían su origen en 2014.
“Manifestamos ante los proveedores nuestra voluntad de pago. Fuimos serios y les dijimos que no podríamos resolver el problema de inmediato. Hubo comprensión y en muchos casos conseguimos llegar a un acuerdo”, describe en tal sentido.
Pero comenzar a dar solución al tema proveedores era apenas uno de los desafíos que en terreno económico se le presentaban en sus primeros días a la gestión Nedela. Otro foco a atender era -y es- el de mejorar la recaudación, teniendo en cuenta que actualmente, y pese a que se consiguió una pequeña mejora en el índice, sólo pagan su tasa por SGU 12 mil de 25 mil partidas.
“Un 80% del presupuesto lo debemos volcar a la masa salarial. Es un porcentaje altísimo, siendo que algunos distritos están en un 50 o 60 %. La cantidad de empleados que tenemos es la que es, así que debemos ir por mejorar la recaudación”, consigna, exponiendo que, además de mejorar el nivel de ‘cobrabilidad’ también es importante fijar un nuevo valor en las tasas.
Entretanto, la ayuda de Nación y Provincia fue vital para afrontar la emergencia del pago de salarios, aguinaldo y horas extras a fines del año pasado y sigue siendo imprescindible para encarar obras y tratar de mejorar la situación del distrito.
“Todos nuestros pedidos tuvieron una muy buena recepción y a la hora de dar los primeros pasos nos vino muy bien el Fondo que el gobierno provincial entregó para afrontar necesidades en obras públicas y seguridad”, revela.
Esos recursos (más de cincuenta millones destinados a infraestructura y alrededor de veinte a seguridad) ya fueron asignados a casi una decena de licitaciones públicas, que se traducen en el inicio de obras como el asfalto de calle 8 uniendo Villa Nueva y Villa Argüello o la refacción del edificio del viejo correo para la instalación del COM, así como en la dotación de infraestructura y servicios al predio de Santa Teresita en que se construirán más de 200 casas a través del Pro.Cre.Ar. o la compra de camiones compactadores y de autos y cámaras para fortalecer el Sistema de Seguridad Pública.
Las exigencias económicas a las que habrá que responder en breve tienen que ver con reunir los alrededor de 36 millones que hacen falta para cubrir los ingresos de los trabajadores municipales: el 15 habrá que pagar horas extras, el 22 aguinaldos y el 29 sueldos. A ello se suma el bono de tres mil pesos en tres cuotas (enero, febrero, marzo), acordado con el gremio.
Pensando en cloacas, viviendas y el Puerto
La extensión del sistema de cloacas es un proyecto en el que el Ejecutivo cifra buenas expectativas. A partir de una iniciativa del gobierno nacional, podrían llegar al distrito alrededor de 25 millones de pesos: veinte para ejecutar trabajos relacionados con la extensión de la red y el resto para afrontar la compra de un camión desobstructor que se sume al único con el que hoy cuenta el parque automotor municipal.
Entre los objetivos que Nedela se traza para los próximos tiempos figura el de tratar de continuar y concluir algunas obras iniciadas en la gestión que lo precedió. En ese campo se inscriben por ejemplo las obras del Centro Cultural proyectado para El Carmen o los planes de vivienda de Villa Progreso (de las 224 casas proyectadas quedan por terminar la mitad) y el barrio San José Obrero (se terminaron 75, 35 están a medio construir y resta iniciarse las que completarían las 350 proyectadas).
Por otra parte, incluida en el lote de las obras nuevas a licitarse figura la construcción de la sede en la que funcionará el Centro Administrativo Municipal del que se dotará a La Franja. “El proyecto apunta a atender un justo reclamo de sus barrios, teniendo en cuenta que alrededor de un tercio de la población de la ciudad vive allí”, recuerda el intendente, mencionando que a la obra se asignaron unos 12 millones de pesos y que la construcción tendrá lugar en un predio municipal ubicado en 122 y 80, al lado del destacamento policial de la zona.
“Fuimos incorporando varios servicios a la Delegación, como una extensión de la Dirección de Cultura o una terminal de Bapro Pagos. También funciona allí el área de fiscalización de habilitaciones y una delegación del registro de las personas y el registro civil”, enumera para referirse a pasos ya dados.
En el plano del despegue productivo, reconoce que la suerte de la ciudad está en buena medida atada al impulso económico que consiga el país. De él depende por ejemplo la evolución en los proyectos ideados para el SIP (Sector Industrial Planificado) y el Polígono Industrial. Y fundamentalmente la suerte que corra la reactivación portuaria.
“El Puerto es un monstruo dormido que nunca despertó. Hubo una inversión monumental pero las grúas nunca se usaron; sólo funcionaron cuando se contrató un barco para subir y bajar un contenedor en la campaña presidencial de Scioli. Lo real es que no funcionó y es una vergüenza para los bonaerenses y los berissenses en particular”, asevera, recordando que en su visita de hace algunos meses, la gobernadora Vidal se comprometió a trabajar en la resolución de obras complementarias imprescindibles (como la bajada de la Autopista) a la hora de pensar en un Puerto que se ponga de pie.
“Tal vez el Puerto no representará un avance enorme en la generación de empleo directo, pero el impacto económico en la región sería muy importante”, sostiene.
Herencia, críticas y el contacto con el vecino
Desde la perspectiva del jefe comunal, las críticas -como la autocrítica- son necesarias para ir corrigiendo rumbos. Pero junto a ellas, es muy valioso el contacto permanente con los vecinos.
Al referirse a las primeras, hace blanco en las que no persiguen ningún fin constructivo. “Es nuestro primer año de gobierno, un año en el que empezamos a afectar muchas cuestiones que estaban enquistadas, mostrando otra forma de actuar, de administrar, de ver la política. Cada cambio que queremos ir haciendo por supuesto que provoca resistencia”, considera.
“Tenemos que estar enfocados en los problemas que no se le resolvieron a los berissenses en 32 años de gestión. No puedo perder el tiempo en contestar a militantes del kirchnerismo que detrás de un micrófono quieren marcarnos el paso de gobierno. No lo voy a permitir, porque tenemos que resolverle el problema a la gente: para eso nos eligieron”, manifiesta tajante, señalando que en buena medida, las críticas más feroces provienen ‘de quienes quieren defender gestiones anteriores, de las que han sido parte’.
“Yo trato de respaldarme mucho es la opinión que obtengo de la gente cada vez que voy a los barrios, a distintas reuniones o incluso a actividades institucionales. Por suerte tengo un contacto permanente con los vecinos, y en general me dicen que no aflojemos”, expone en contraposición.
“Saben muy bien qué es lo que pasó en la Argentina, en la provincia y en el distrito. Saben que no se cambia de un día para otro y que fundamentalmente de lo que se trata es de cambiar una cultura política”, añade.
Con todo, en muchos ámbitos se entiende que las críticas que se efectuaban a la anterior gestión no tuvieron su correlato con sanciones efectivas.
“No es tan fácil. Nadie deja registrado un acto de corrupción. Es difícil rastrear ese camino o esa ruta para detectarlo. A uno le hubiese gustado tener mayor cantidad de elementos para poder mostrarlo. Pero creo que los elementos los podemos ver en cómo quedó la ciudad. Ese es el ejemplo más claro, el ejemplo contundente de que algo no funcionó”, advierte al respecto Nedela. “Puede que en ese aspecto haya algo de impotencia. Pero somos pocos aunque seamos cien mil y nos conocemos. Los berissenses sabemos quién, de una manera muy particular, pudo cambiar su forma de vida de un día para el otro”, completa.
La planta política
Para Nedela, la planta ‘política’ que lo acompaña en su gestión no está sobredimensionada, como sugirieron en los últimos tiempos algunas publicaciones en redes sociales.
“Las coordinaciones fueron una creación de las gestiones anteriores para responder a la falta de estructura del Municipio. Muchas existen porque al organigrama le faltan roles. Un coordinador en Seguridad Vial o en la Oficina del Consumidor o en Tercera Edad podría ser director, pero la figura de las coordinaciones permite no tener tan alto impacto presupuestario”, expone.
En cuanto a los ingresos de funcionarios del Ejecutivo y concejales, da una respuesta como la que diera ante planteos similares en los primeros meses de su gestión, asegurando que ‘son los establecidos por ley’.
“La ley orgánica municipal establece cómo se conforma el sueldo del intendente y a partir de ahí se engancha el sueldo del resto de funcionarios. No tenemos más funcionarios que los que existían y estamos por debajo del número de coordinaciones de la gestión anterior. Y de hecho, muchos de los que hacen críticas, han sido coordinadores de la gestión anterior”, comenta. “Tal vez no entiendan que si estoy acá, no es para ganar plata”, dice también.
Macri y Vidal
Mientras desde sectores de la oposición, sobre todo los de filiación kirchnerista, arrecia la adjetivación de signo negativo para las gestiones que Mauricio Macri y María Eugenia Vidal encabezan en Nación y Provincia, Nedela expone que algunos ‘temores’ que experimentaba en tiempos en los que el Frente Cambiemos se conformaba, fueron disipándose.
“Mucho hemos hablado del tema con amigos de nuestro partido. Siempre había un recelo cuando nos hablaban de YPF, de las privatizaciones o del peligro que podían correr algunas políticas sociales. Pero veamos algunas cuestiones en concreto: YPF es del Estado y sigue siendo defendida por el gobierno nacional; por el boleto estudiantil peleamos por años y se terminó aprobando mientras Vidal es gobernadora”, describe. “Después de 12 años de kirchnerismo, hay cosas que no debemos dejar de mirar. Uno habla de la República y parece algo abstracto, pero algunos valores fueron muy atacados. El hecho de que hoy podamos sentarnos a una mesa personas que pensamos distinto y que podamos conversar y llegar a acuerdos, es de alguna forma volver a un camino iniciado en el ‘83”, consigna luego.
Para el jefe comunal, a algunas críticas ‘prejuiciosas’ se le oponen algunas políticas que encara el gobierno en el plano social. “Veamos cómo terminamos el año, con asignaciones con aumento y una relación muy productiva con organizaciones sociales. Se están atendiendo muchos temas pendientes e incluso en la provincia, la gobernadora se metió con coraje en problemas enormes como los que representan la policía y el sistema penitenciario. No dijo ‘maquillamos un poco y seguimos’, sino que fue a fondo”, advierte, considerando a Vidal ‘uno de los cuadros políticos más importante de los últimos tiempos’.
El poder
Interrogado acerca de cómo concibe el poder, luego de ejercerlo a lo largo del último año como máximo responsable del destino de la ciudad, Nedela no duda. “El poder es servicio”, asevera. Y el antídoto para no ‘marearse’, indica, está en el anclaje en la familia y en los amigos, así como en saber distinguir a ‘los amigos del campeón’. “Me doy cuenta cuando aparecen”, asegura.
Tal vez no ‘padece’ el poder, como alguna vez reveló Raúl Alfonsín, pero reconoce que el poder es una carga, porque genera una responsabilidad muy grande.
“De todas formas soy consciente de que estar en este rol es por un tiempo. Quiero que sea acotado: que empiece y termine, para después seguir con el resto de las cosas que a uno lo apasionan y en el medio no perder cosas importantes. Quiero preservar mi familia, mi matrimonio, mi hijo que es un chico que tiene apenas 10 años. Extraño muchísimo no estar en el aula en contacto con los alumnos, algo que tuve que dejar a mitad de año para responder con todo a la responsabilidad que ahora me toca. La docencia me llena el alma, pero también esto, que es encontrar soluciones a los problemas que alguien enfrenta”, concluye.
