El miércoles a la noche, efectivos del Comando de Patrullas acudieron a 168 entre 40 y 41 para dar respuesta un llamado que planteaba una situación de riesgo para varios menores de edad que se encontraban en soledad dentro de su domicilio, desprovistos de la asistencia de un mayor.
Al arribar al lugar y luego de entrevistarse con la persona que informó del hecho al 911, los efectivos se acercaron al domicilio y constataron que dentro del mismo se hallaban los niños en un estado total de descuido. Con el objetivo de proteger su integridad, procedieron a trasladarlos a la Comisaría de la Mujer, dando intervención al servicio zonal de promoción y protección de los derechos del niño.
Adriana Caballero, encargada de coordinar a nivel local el servicio de niñez, manifestó que se trata de una situación compleja en la que se interviene desde hace alrededor de un año por pedido del establecimiento educativo al que solían asistir los niños. «Empezamos trabajando tanto con los niños como con los padres, a quienes, lejos de culpabilizarlos, intentamos acompañar en sus roles para fortalecer los vínculos que mantenían con sus hijos», explicó.
Además, resaltó el compromiso de los vecinos así como el trabajo de los equipos de orientación de las escuelas 10 y 6 y de las trabajadoras de la Unidad Sanitaria N°17. A pesar de las acciones, la situación ‘se fue complejizando con el tiempo’ y a pesar de los intentos por evitar la institucionalización de los chicos, finalmente se hizo necesario ordenar el traslado de los mismos hacia un lugar asistencial donde se resguarden sus derechos. «La medida de abrigo dispuesta para los niños tiene como pretensión tanto resguardar sus derechos como trabajar sobre las cuestiones que han vulnerado sus derechos. Para ello se trabajará con los padres en la reconstrucción del vínculo que permita la externación de los chicos», explicó Caballero.
