En el marco de la Fiesta del Vino, productores ligados al Mercado de la Ribera juntaron firmas para solicitar que se trate en forma urgente un proyecto de Ordenanza presentado ante el Concejo Deliberante que busca crear un marco regulatorio para el Mercado, con el objetivo de generar mejores condiciones para la venta de los productos locales.
La iniciativa, elaborada por las asociaciones de productores de Berisso, la Escuela Agraria, productores independientes y personal de la Facultad de Trabajo Social de la UNLP y la Oficina de desarrollo local del INTA, había sido presentada inicialmente en octubre del año pasado ante el Secretario municipal de Producción, Carlos Carrizo.
Según lo expuesto ante este medio por Alejandra Bulich, trabajadora social comprometida con el desarrollo del Mercado, la falta de tratamiento del proyecto por parte del Ejecutivo derivó en una presentación que, el 29 de mayo, realizaron ante el Cuerpo Deliberativo. En tal sentido, Bulich aseguró que si bien el proyecto se encuentra hoy en la Comisión de Industria y Comercio, ‘dos días después de ser puesto en manos de los concejales fue llevado nuevamente al municipio pero esta vez al despacho del mismo intendente Jorge Nedela, quien se comprometió a revisarlo con celeridad’.
Al referirse al petitorio que se puso a consideración del público de la Fiesta del Vino el fin de semana, Bulich describió que fueron más de mil personas las que dejaron su firma.
“Apuntamos a la consolidación de un espacio que no solo permite la comercialización sino que fundamentalmente se propone recuperar la cultura ribereña”, puntualizó refiriéndose a la Fiesta, agregando que desde su inauguración, los productores locales vienen trabajando “no sólo con fines mercantiles sino también para acercar a los visitantes a los saberes, sabores, colores y aromas que forman parte de la identidad local”.
Puntos claves para entender el proyecto
Desde las instituciones que participan del Mercado de la Ribera se describió la iniciativa como ‘la herramienta necesaria para dar forma a los acuerdos que se fueron construyendo colectivamente’ y para ‘afianzar los procesos de organización generados entre dicha comunidad con el diálogo como pilar fundamental’.
El punto clave del proyecto de Ordenanza tiene que ver con la conformación de un ente administrador para la co-gestión del Mercado, el que de acuerdo a la propuesta estaría compuesto mayoritariamente por representantes de las asociaciones de productores y en menor medida por las instituciones vinculadas con la agricultura familiar (UNLP, INTA, Escuela Agraria) y el Municipio.
Dicho órgano sería el encargado, por ejemplo, de establecer las fechas y horarios de funcionamiento del Mercado así como de controlar por medio de personal técnico el estado de los productos que se comercializan. Respecto a los permisos de usos, se propone que sean presentados ante el ente administrador, que tendría la facultad de formalizar los trámites mediante la vía administrativa correspondiente. Según establece el proyecto, los permisos de uso estarían destinados ‘sólo a productores locales’, quienes tendrían garantizada la gratuidad de los mismos.
Otro eje que se tomó para efectuar la presentación habla de desarrollar el Mercado también como espacio de difusión de la cultura ribereña, fomentando actividades de formación, talleres, muestras y encuentros.
