“Labandadelpaulito22†es la cuenta de Instagram que abrieron familiares y amigos para difundir la vigilia y sumar intenciones de fe por la vida de Paulo Ifran, un joven de 19 años que pelea por su vida en el Hospital Larrain después de protagonizar un accidente de tránsito.
En su descripción la cuenta refiere: “Somos amigos del gordo y vamos a subir los dÃas y noches que vamos a estar haciendo el aguante para que el gordito salgaâ€. Y es que desde ocurrió el trágico hecho hace una semana, familiares y amigos se organizan para visitarlo, orar por él y enviarle la energÃa necesaria para que pueda salir del hospital.
El accidente tuvo lugar en 165 entre 26 y 27 el pasado sábado 11, generó la actuación de la comisarÃa Segunda de Berisso y es investigado en el ámbito del Departamento Judicial La Plata como un caso de lesiones culposas.
Su hermano Nazareno reseña que Paulo chocó de frente contra otra moto. Desde entonces está internado e intubado. “Tiene los pulmones inflamadosâ€, describe mientras espera un nuevo parte médico, resaltando el apoyo que tuvo la familia desde el primer momento. “Estamos dÃa y noche esperando que vuelva a salir por la puerta del Hospital. Sentimos que nuestra presencia le da fuerzas. Lo estamos esperandoâ€, afirma.
Celli lo conoció entrenando Kick Boxing y es una de sus mejores amigas. Se conmueve cuando lo recuerda. “El gordo es mi hermano, es mi compañero. Ayer pudimos entrar a verlo y le dije que lo espero. Le hablamos y le hacemos videos para motivarloâ€, menciona.
La vigilia es noche y dÃa. Se organizan, llevan mantas y sillas. Las madres también acercan comida y bebidas para que puedan pasar la noche. “Nos organizamos para que lleguen desde la iglesia y rezamos. Paulo es de oro. Lo conozco hace un año y es lo mejor que me pudo pasar en la vidaâ€, explica otra de las jóvenes que, sentada en el cantero de la calle 6 aguarda esperanzada.
También invitan a la comunidad a sumarse a la cadena de oración en la parroquia “Nuestra Señora de Luján “ de 23 y 163 donde a las 20:00 celebran la misa por la recuperación del joven y anticipan que el rito continuará cuando el joven sea dado de alta.
La cadena de fe y oración da apoyo y contención a la familia. “Si no fuera por ellos todo serÃa más difÃcilâ€, explica la mamá conmovida por el amor que dÃa a dÃa llega de conocidos y vecinos anónimos que con una palabra de aliento le entregan ánimo. “Es un orgullo como mamá que gente de distintas edades y religiones, estén con nosotros. Sabemos que va a salir y que se vienen cosas muy lindasâ€, vaticina. “Estamos agradecidos a la región por unirse a nuestra fuerza porque sabemos que llega ese amor. Son increÃbles. Jamás me imaginé vivir una situación asÃâ€, dice finalmente.
