A media mañana del pasado viernes, con una visita a la redacción del Semanario, el candidato a senador nacional por el Frente Justicialista Cumplir, Florencio Randazzo, dio inicio a una serie de actividades programadas en el marco de su visita a la ciudad.
Antes de emprender una caminata por Avenida Montevideo, para mantener contacto con comerciantes y vecinos en general, el ex-Ministro del Interior y Transporte compartió definiciones acerca de la coyuntura pre-electoral y de lo que le espera al país y al peronismo luego del 22 de octubre, entre otros varios temas.
De la recorrida participaron también, entre otros, Florencia Casamiquela, candidata a senadora nacional en segundo término por la lista 509, y los principales referentes del paño local de la boleta, los candidatos a concejal Federico Ruiz, Viviana Mustafá y Emiliano Juzwa. La caminata concluiría en la sede de la Cooperativa Argentina Textil, en donde Randazzo conversó con Alberto dos Santos, su presidente, acerca del presente que enfrentan las pymes.
En la sala de entrevistas de la redacción del Semanario, Randazzo aceptó inicialmente definir en pocas palabras algunos espacios con los que el Frente Justicialista Cumplir confrontará en las urnas. Se sumaron luego apreciaciones sobre diferentes temas, que también se consignan en el extracto que sigue.
– Llegaremos a su definición respecto de lo que representa Cumplir. Camino a eso, ¿Qué es Unidad Ciudadana y qué Cambiemos?
– Unidad Ciudadana es un espacio que lleva como candidata a Cristina Fernández de Kirchner. En referencia a lo que fue el Frente Para la Victoria como estructura política que sostuvo al kirchnerismo a lo largo de 12 años, es un espacio mucho más chico. Se decidió dejar afuera al peronismo, con el solo objetivo de evitar las PASO con nosotros, es decir de no permitir que el conjunto de la ciudadanía definiera con anticipación cuál era el candidato que mejor representaba el espacio opositor.
Cambiemos representa a un gobierno que sostiene su éxito electoral sólo por ser la contracara de Unidad Ciudadana. Sus referentes discuten permanentemente el pasado y no el presente, lo que es muy complicado. Es un gobierno que por ejemplo no toma decisiones en función de generar condiciones para generar trabajo. Es un espacio que no representa el interés de la mayoría de los argentinos, es decir de los más humildes y de la clase media.
– ¿Dónde se ubicaría Cumplir en el contexto de la actual coyuntura políltica?
– Nosotros representamos esos intereses desde el peronismo, por pertenencia histórica y por coherencia con los principios de nuestro partido. Creemos en los valores, que están dados para sostener las ideas, independientemente de las coyunturas. Sabemos que desde la gestión se puede transformar la realidad. De hecho, pudimos resolver varios problemas de la sociedad cuando asumimos desafíos con nuestro equipo. Eso nos da crédito para ofrecernos como opción a la hora de enfrentar problemas actuales, como los relacionados con el trabajo o la seguridad, entre otros.
– El escenario de cara a las legislativas parece cada vez más polarizado. ¿Qué diría al respecto?
– Que estamos ante una trampa. Votar por Cambiemos para que no vuelva Cristina es dar una señal equivocada al gobierno, que cree que ese voto ratifica las políticas actuales, de pérdida de empleo, caída de consumo, dificultades de pymes, tarifas impagables para el hombre común. Por otro lado, votar a Cristina para castigar a Macri es creer que los problemas presentes se resuelven con el pasado. Pero el futuro no se construye con el pasado, mucho menos con uno sin autocrítica; ya la sociedad nos dio la espalda en el 2013 y en el 2015, pero un sector que conforma Unidad Ciudadana hasta parece cuestionar el voto popular, algo que jamás se hace desde el peronismo. La sociedad no se equivoca, tanto cuando te acompaña como cuando no lo hace.
– Más allá de lo que representan las legislativas, sigue sin resolverse cómo se reconfigurará el peronismo de cara al futuro. ¿Qué camino habría que recorrer de cara a las próximas presidenciales?
– Primero hay que terminar con el oportunismo. Si son peronistas, ¿Por qué no participan de las PASO?. No puede ser que la política sea una carrera de especulaciones. Cristina dice que es peronista y creó Unidad Ciudadana sin el peronismo. ¿Por qué Massa, que dice que es peronista, en el 2015 confeccionó listas con Macri y ahora está con Stolbizer?. No tenemos el ‘peronómetro’, pero aspiramos a un peronismo que sea coherente con las ideas, las convicciones, que sea capaz de adherir a tres valores como lo son los de ‘no robar, no mentir y cumplir’, además de jamás estar en contra de la base de representación del peronismo que son los más humildes y la clase media. ¿Cómo explican los compañeros que hablan en nombre del peronismo que le juegan en contra? ¿No es incoherente eso, no hace que la sociedad descrea de la política?
– El concepto de ‘lealtad’ define en cierta forma al peronismo. Durante los años de administraciones kirchneristas, por temor, conveniencia o algunas otras razones ¿No se transformó esa ‘lealtad’ en ‘obediencia’?
– La columna vertebral del kirchnerismo fue el peronismo. Yo resisto archivo y siempre dije que era peronista, no kirchnerista. ¿Por qué? Porque el kirchnerismo era más amplio: representaba la estructura social conformada tras la crisis de 2001. Pero eso se fue achicando hasta terminar siendo ‘La Cámpora’. La lealtad no es con los dirigentes, con los busca-cargos, con los oportunistas, es con la gente. Algunos sostuvieron una idea durante 30 años y un día abandonaron la idea producto de un cargo o la especulación electoral a través de una encuesta. No creemos en eso. Debemos reconstruir la confianza con la sociedad, defender a rajatabla el prestigio de los dirigentes.
– Usted se manifestó muy crítico del rumbo que sigue el gobierno. ¿En estos casi dos años de gestión se adoptaron medidas que generarán perjuicios muy difíciles de revertir? ¿No hay vuelta atrás para algunas políticas en curso?
– El gobierno apela a recetas ya fracasadas, que tienen que ver con enfriar la economía, quitándole poder adquisitivo al salario; está claro que los precios suben por ascensor y el salario por la escalera. El gobierno intenta bajar la inflación con la emisión de LEBACs, lo que significará este año una erogación, solo por intereses, de 220 mil millones de pesos, algo así como 13 veces la inversión ferroviaria que hicimos en los tres años en los que fui ministro de Transporte. A la vez, el ajuste: en el Presupuesto 2018 un 14% de los recursos aparece destinado al pago de intereses. Eso es cuatro veces lo invertido en salud o dos veces lo invertido en educación, ciencia, tecnología y cultura. Se quitan 35 mil millones de pesos en subsidios, 30 mil en luz y gas y 5 mil en transporte, lo que repercutirá en los usuarios. La filosofía de Cambiemos es muy diferentes de la que tenemos quienes provenimos del peronismo. Ellos creen en el éxito personal; nosotros no creemos en un desarrollo que no surja de un modelo de país que repare en el conjunto. Claro que estamos a tiempo de revertir esto y en las elecciones del 22 empezamos a tratar de transitar ese camino, pero tenemos que ser generosos, abandonar la soberbia y los personalismos. En ese plano, la candidatura de Cristina, se lo dije a ella en persona, es lo más funcional al gobierno. Lo que nunca creímos es que muchos dirigentes peronistas con pertenencia histórica iban a avalar semejante despropósito: irse del peronismo para terminar ratificando un capricho de Cristina.
– En Berisso, distrito históricamente gobernado por el peronismo, hoy gobierna Cambiemos. ¿Cuál es su reflexión al respecto?
– Se da acá una situación similar a la de otros municipios de la provincia. Tal vez, por el ADN histórico de Berisso, correspondería hacer un análisis más profundo de lo que ha pasado. Seguramente ha tenido que ver con la responsabilidad de algunos dirigentes.
– Durante muchos años, en la ciudad la figura de Randazzo estuvo asociada a la de dirigentes locales como Federico Ruiz o Juan Ignacio Mincarelli. ¿Cómo quedó la relación con Mincarelli, hoy en un espacio diferente?
– Transitamos muchos años juntos, desde 2002. Es una pregunta que habrá que hacerle a él. No sé los motivos por los que habrá tomado esa decisión. Sobre todo porque nos había acompañado durante mucho tiempo. Hacía honor a las convicciones, a los valores, a la pertenencia al peronismo, a la coherencia. No hemos vuelto a conversar. Creo en los dirigentes que han demostrado coherencia, valores. El conjunto de la sociedad valora ese tipo de cosas. Tal vez muchas veces no tengan un reflejo electoral inmediato, pero si la Argentina quiere salir de su estado de postración definitivamente y plantearse el progreso como objetivo, eso tiene que estar presente.
Los pasos que los máximos exponentes de Cumplir darán en la última semana de campaña tendrán que ver con la visita a otros distritos, con un acto por el 17 de Octubre que se llevará a cabo en La Matanza y con el acto de cierre, que se efectuará en Chivilcoy el jueves 19.
