Trabajadores del lugar anunciaron que no ingresarán hasta tener garantías de no correr riesgos. El Ejecutivo asegura que un informe da cuenta de un edificio 'en condiciones'
Los trabajadores que desempeñan tareas en el edificio de la Mutual 10 de Junio continúan en alerta por el estado que presenta el edificio ubicado en la calle 166 entre 9 y 10. Si bien se radicaron denuncias desde 2015 dando cuenta de las condiciones que allí se advierten, las inspecciones no dieron cuenta de ello.
Paredes por donde cae el agua, baños desbordados, puertas sin picaporte, paredes electrificadas son algunos de los peligros a los que, según denuncian UPCN, ATE, el STMB y la agrupación ‘8 Once’, están expuestos los trabajadores y el público que concurre a las oficinas del Plan Más Vida, IPS, Discapacidad y Patronato de Liberados.
El último episodio de riesgo tuvo lugar el 18 de octubre cuando, por falta de pago, cortaron la luz. Cuando fueron a realizar la re- conexión se quemaron equipos con los que el personal trabajaba.
Lo más grave, explican desde los gremios, fue que las tareas se realizaron ‘con los trabajadores dentro’.
Mientras desde los gremios denuncian ‘un error’, desde el Ejecutivo sostienen que se trató de un confuso episodio pre-electoral, donde se conectó la luz a una línea trifásica. “Nosotros negamos desde el municipio haber dado la orden para esa conexión que se dio de forma irregular. No es la primera vez que sucede. Generó que salga humo, que se quemen artefactos”, detalló Manuela Chueco, Secretaria de Promoción Social, quien aseguró además que se elaboró un informe desde el Estado municipal con un empleado competente en la materia que da cuenta de un edificio que actualmente se puede utilizar. Sin embargo, expone, ‘para uno de los gremios no es una prueba suficiente’. “Están duros con la postura de pedir el informe al Colegio de Técnicos. Apostamos al diálogo para poder destrabar el conflicto”, consignó la funcionaria.
Los gremios decidieron interrumpir la atención, clausurar el edificio, mantener asambleas y visibilizar el conflicto con los vecinos.
“Queremos que nos den garantías para trabajar. Nosotros queremos que respondan por lo que ocurrió. Explotaron lamparitas y se quemaron computadoras. Que nos digan quién dio la orden de conectar la luz en estas circunstancias. Fue un acto de negligencia e irresponsabilidad” definieron fuentes sindicales, al tiempo que celebraron ‘la lucha conjunta’ y desconocieron los arreglos que se realizaron en los últimos días, calificándolos de ‘desesperados’.
Al cierre de esta edición, trabajadores y gremios resolvían permanecer en la puerta del edificio hasta obtener una respuesta satisfactoria. También anunciaban que compartirían una nueva asamblea antes de retornar al diálogo con los funcionarios.
