Este domingo se celebra el Día internacional de los Humedales, fecha que sirve para recordar las numerosas funciones que cumplen estos ambientes, como nos benefician y la importancia de su conservación como fuentes de agua dulce y biodiversidad.
Ríos, bañados, lagunas, canteras, pajonales, son algunos ejemplos de humedales.
En Berisso contamos con varios ejemplos de ellos, el bañado de Maldonado es uno, esa inmensa depresión cubierta de pajonales y bañados en el centro del partido. Una enorme esponja que cumple la función vital de contener los excesos de lluvias en la región.
Los cursos de agua que serpentean nuestra superficie y por pendiente desaguan en la costa del Río de la Plata, como el Arroyo El Pescado, amparado en la liviana figura legal de Paisaje Protegido, o la cañada La Bellaca, que junto a otros de menor caudal interaccionan transportando distintos caudales según la época del año.
Las canteras, ojos de agua dulce o ligeramente salobre, que se disponen a lo largo del camino en Los Talas son fuentes de agua permanente, por su alimentación de napas o conexión con el río.
Canales y zanjones urbanos, los paralelos a la avenida 66, el Maldonado o el canal Génova, cursos que originalmente recibieron pluviales, pero en la actualidad reciben cargas cloacales y nuestra basura. Así y todo intentan ser humedales urbanos.
El extenso litoral costero del Río más ancho del mundo, que nos brinda recreación y pesca variada todo el año.
El canal Santiago y su delta, aportando nutrientes y vida al monte ribereño.
Estos ambientes y más nos brindan servicios todos los días a los berissenses, regulan la temperatura, contribuyen con las lluvias y el cambio climático, depuran el agua para nuestro consumo y riego. Son espacios para la práctica de múltiples actividades paisajísticas y deportivas.
Pero también; y esta es la parte desconocida pero a su vez la más importante para que los citadinos aprovechemos los recursos arriba mencionados; son fuentes de biodiversidad, complejos sistemas de infinitas fuentes de vida: insectos, peces, anfibios, reptiles y mamíferos dependen exclusivamente de estos ambientes. Una trama infinita de plantas y animales que funcionan como un todo, y son tan generosos que además de su supervivencia, nos brindan sus servicios. Cada bicho que vive en un humedal, sostiene una red que nos abarca a todos. Por todo esto hay que conservarlos y proteger el preciado tesoro que conllevan, el agua, de todos y para todos.
Muchas veces escuchamos que se necesitan obras para que no nos inundemos más, para proteger un barrio, pero nadie pensó que ese barrio no debería estar allí porque seguramente no era un lugar apropiado para su instalación. Y siempre vamos marcando y corrigiendo desde atrás, nunca paramos la pelota para una palabra mágica ausente en muchos despachos municipales, planificación.
Los humedales son casi un organismo perfecto, un todo que funciona con muchas partes pequeñas. Se autoregulan, se equilibran y tienen las mejores respuestas.
Berisso se encuentra en una región, en una cuenca hidrográfica, no existen los límites municipales impuestos por el hombre para la memoria del agua. Conocimiento, prevención y sentido común serán los mejores pilares para que estos sistemas sigan funcionando. Ignorancia, soberbia y cortoplacismo, su tumba. Nuevas miradas, nuevos conceptos, nuevas ingenierías para estos ecosistemas únicos. Y lo más importante, nosotros nos adaptamos a los ambientes, y no al revés. No hay más tiempo para seguir equivocándose.
Caminata a orillas del Canal Génova
Adhiriendo al Día Internacional de los Humedales, el Museo Ornitológico y Centro de Interpretación Ambiental (MOCIA), dependiente de la Dirección de Cultura llevará a cabo una caminata por las orillas del Canal Génova de Berisso.
El objetivo de la actividad es dar a conocer los beneficios que estos ambientes brindan a los ciudadanos y dar cuenta del funcionamiento del Canal Génova como humedal urbano para los berissenses.
El encuentro será este domingo a las 17:30 en el Puente 3 de Abril. Se recomienda llevar ropa y calzado cómodo, sombrero, agua y algo para compartir la merienda.
