La subcomisión de Jóvenes de la Asociación de Entidades Extranjeras propuso el pasado domingo en la sede de la Media 1 un festival infantil de colectividades que tuvo entre sus objetivos el de reunir alimentos no perecederos destinados a la Unidad Sanitaria Nº 16, con sede en 169 y 33. La idea, mencionaron desde el grupo de jóvenes, surgió a partir de un contacto con la Dra. Cecilia Pérez, responsable del ese centro sanitario.
Así, se puso en marcha la organización y fue articulándose el evento, del que participaron con sus grupos de danzas las colectividades árabe, polaca, belarusa, lituana, italiana, alemana, irlandesa, española, griega y eslovaca. También se comprometió con la actividad el taller de Lenguaje de Señas “Mis manos hablan por mí”, que se desarrolla en el ámbito de la Dirección municipal de Cultura. Y para completar la propuesta, hubo una chocolatada con la que colaboraron los miembros del CEVECIM Berisso y un buffet atendido por la propia subcomisión juvenil de Entidades Extranjeras, en el que los asistentes pudieron adquirir platos dulces, café y gaseosas.
La tarde transcurrió en un clima de alegría y confraternidad y culminó con el acopio de una importante cantidad de alimentos varios que ya fueron puestos a disposición de la unidad sanitaria.
Cabe mencionar que en la salita, que funciona en el Centro de Integración Comunitaria (CIC) de su barrio, todos los sábados a las 15:00 -desde hace siete años- se desarrollan las actividades del Taller de Biblioteca Viajera.
La propuesta es abierta a toda la comunidad y concurren chicos de todas las edades interesados en compartir un rato de lectura, narraciones, contacto con los libros y actividades plásticas. Quien quiera participar o colaborar con la iniciativa puede hacerlo acercando libros infantiles o de estudio, así como útiles escolares y materiales de plástica.
Caída la tarde y luego de la despedida hasta un próximo encuentro, la subcomisión de Jóvenes hizo público su agradecimiento a la Escuela de Enseñanza Media N° 1 por ceder las instalaciones; a la Dirección de Cultura por el sonido para el evento; a los ex-combatientes del CEVECIM por aportar la cocina y el chocolate; a la Municipalidad por donar la leche para la chocolatada; al grupo “Mis manos hablan por mí”, por su participación especial; a los ballets que participaron con sus danzas; a Aniela Remorini Gasunaitė por la conducción y al conjunto de la comunidad berissense, por su habitual compromiso solidario.
