La dirigencia del Centro de Estudiantes y Egresados espera la inminente vuelta a las prácticas de sus disciplinas deportivas. La entidad de calle 13 encara nuevos proyectos para generar recursos que le permitan, en lo económico, solventar aspectos deportivos y sociales.
Como le ocurrió a la mayoría de las instituciones, los meses de pandemia y su correlativa suspensión de actividades, en adhesión a las disposiciones de aislamiento y protocolos, repercutió de manera significativa en su funcionamiento regular y en la posibilidad de generar recursos para mantenerse y proyectar mejoras.
El Centro de Estudiantes y Egresados no escapó a esa realidad general y se prepara para afrontar un 2022 con sus actividades a pleno, pero con la necesidad de generar recursos que le permitan mantenerse con un funcionamiento adecuado y afrontar nuevos desafíos.
Para esto, la dirigencia elabora nuevas estrategias y planifica además abordar instancias que tienen que ver con el desarrollo de sus disciplinas propias y con una visión amplia en lo social.
Ante este esquema, el presidente de la entidad, Claudio Di Giovambattista repasó en primera instancia algunos de los efectos que causó el parate obligado en lo institucional. “La pandemia influyó y mucho. Nos estamos preparando para retomando la actividad, pero tenemos por ejemplo la incertidumbre de lo qué ocurrirá con la concurrencia de los más chiquitos que siguieron las clases de entrenamientos y actividades físicas de manera virtual. Es uno de los factores que veremos como repercute en las próximas semanas”.
En cuanto al comportamiento de los asociados, el dirigente agradeció el apoyo recibido en los meses pasados, ya que se sostuvieron en su cantidad y con un importante cumplimiento en los pagos de las cuotas. De esta manera de los 700 socios que cuenta el club entre activos y protectores, casi unos 600 se han mantenido al día con el pago de 100 pesos mensuales. “Además muchos otros siguieron abonando la cuota deportiva a pesar de que su hijos no tenían las actividades por la pandemia. Eso lo debemos resaltar porque la gente hizo su esfuerzo y acompañó. Ese dinero nos permitió mantener las instalaciones y pagar los servicios, pero no mucho más que eso. También comenzamos a utilizar los sistemas de pagos electrónicos y transferencias bancarias que nos facilita el cobro”.
Si bien la pandemia truncó proyectos que la comisión directiva evaluaba desarrollar, otros pudieron concretarse. Uno de ellos durante el receso del año anterior que se aprovechó por medio de subsidio aportado desde la Nación, para hacer arreglos integrales y cambios estructurales en el techo de la cancha de básquet. “Ya pudimos constatar que funcionaron muy bien y evitan las filtraciones de agua por las lluvias. Se trabajó sobre mil metros cuadrados de tinglado con múltiples tareas”, repasó Di Giovambattista, quien agregó que también se efectuaron refacciones por medio de un subsidio provincial en la cancha sobre lugares que se dañaron por el uso y por las lluvias que la afectaron antes de los arreglos del techo del gimnasio.
Además el frente de la entidad de calle 13 entre 166 y 167, presenta una fachada totalmente renovada. “Antes de fin del año terminamos mejoras en el frente, se sacaron los azulejos y se hizo una pintura texturizada, se actualizó el cartel de ingreso y se agregaron rampas para discapacitados. Fuimos avanzando en lo que pudimos con los recursos que tenemos”, afirmó el presidente, quien destacó la labor permanente de los dirigentes que nunca dejaron de reunirse tanto de manera virtual como presencial cuando se pudo hacer.
Vuelta a las actividades
Ceye se prepara para dar inicio ya a principios de febrero a los entrenamientos de sus categorías de básquet, mientras que en la segunda quincena de este mismo mes volverá el vóley. Otras disciplinas como artes marciales, aeróbicas, zumba y demás, esperan que se regularicen en marzo, aunque algunas de ellas estuvieron funcionando.
Por su parte la Escuelita de Básquet, a la que concurren los más pequeños y que no es de tipo competitiva, se retomará luego del inicio del ciclo lectivo escolar.
Nuevos desafíos
Tal cual lo interpretan sus dirigentes, los clubes de barrio se encuentran ante nuevos desafíos vinculados con los cambios en la sociedad y en la necesidad de generar recursos, para lo que es primordial tener una fuerte presencia en la comunidad y acudir al apoyo de empresas y comercios. “El club año tras año iba reservando recursos para reinvertir, pero en estos largos meses de pandemia todo eso se gastó y no hubo ingresos nuevos. Necesitamos mantener las disciplinas y las instalaciones y los ahorros se han ido”, consideró el presidente.
Una de las alternativas en la que espera avanzar la institución es realizar las trasmisiones en vivo de los cotejos que el primer equipo de básquet dispute en condición de local. “Vimos que lo hizo y muy bien un club amigo como el Hogar Social. Hablamos con ellos y nos contactamos con quienes le trasmiten los partidos y estamos en tratativas para que nosotros también lo podamos llevar adelante vía streaming. A fines de febrero o principios de marzo seremos organizadores de la Copa Ciudad de Berisso y si cerramos un acuerdo, el certamen se trasmitirá a manera de lanzamiento para nuestra institución. Para concretar esto necesitamos sumar sponsors y trabajar con las redes sociales para obtener ingresos, en campos que no explotamos hasta ahora y por eso también estamos en búsqueda de alguien que cumpla la tarea de Community Manager”, definió Di Giovambattista.
Como lo sostuvo el presidente, Ceye tiene en cuenta que además de lo deportivo, debe atender con nuevas modalidades otras cuestiones de tipo social, para lo que pretende en el corto plazo constituir una Comisión de Género. “Son temas que debemos abordar y para lo cual nos tenemos que capacitar. Seguimos siendo un club de barrio, pero debemos prepararnos para atender otros tipos de temas de la sociedad actual”.
El aspecto económico es una preocupación permanente, a lo que la dirigencia espera poder regularizar. “Los problemas de ingresos hay que suplantarlos con ingenio y más hora todavía de trabajo. Estamos tratando que la gente que pasó por el club se sume a acompañar y a aportar ideas. Necesitamos del apoyo de todos, queremos tener una institución que ofrezca contención y derechos para todos, los que se deben abordar desde nuevas perspectivas”.
El presidente destacó también la muy buena relación que en la actualidad mantienen con los otros clubes locales. “Superamos viejas antinomias con Villa San Carlos y con el Hogar Social, con sus dirigentes hablamos y nos consultamos cosas y tratamos propuestas conjuntas”.
