El 21 de noviembre, la emblemática institución local alcanzó sus ocho décadas de trayectoria. Este sábado, la fiesta anual de premiación tendrá un aditivo especial.
El Hogar Social “Coronel Juan Domingo Perón” cumplió el pasado 21 de noviembre ocho décadas de existencia, tiempo en el que fue afianzándose como un espacio emblemático de la ciudad. A lo largo de estos ochenta años pasaron directivos, se renovaron socios, se efectuaron reformas, se adquirieron las tierras y se generaron proyectos, siempre condicionados por los avatares económicos del país que hicieron necesario aguzar el ingenio y multiplicar los esfuerzos.
Más allá de los ‘tiempos difíciles’ y sobre todo en ellos, numerosos hombres y mujeres asumieron su compromiso para que ‘el Hogar’ diera pelea y pudiera mantener las puertas abiertas.
En la actualidad, el club es presidido por Luis Tamone, quien resaltando la alegría de llegar a los ochenta años, ofreció un detallado repaso de los orígenes de la entidad de calle Nueva York.
En su reseña, el dirigente marcó que cuando transcurría el año 1943, un pequeño grupo de vecinos avanzaron en la idea de crear en Berisso una institución que nucleara a los trabajadores que llegaban de los diferentes rincones del país para trabajar en la industria frigorífica y en las empresas que por entonces estaban instalabas en la zona.
Tras ese cometido, la primera reunión se realizó en un local de Avenida Montevideo al 600 que por ese entonces pertenecía al Círculo Cultural Berissense. En dicho encuentro, se le encomendó al Doctor Carlos Desmarás y a la señorita Isabel Botana, la redacción del Estatuto fundacional.
Convocados para el día 21 de noviembre, los participantes de esa asamblea inicial aprobaron los primeros artículos del Estatuto, que constituyeron la base de la nueva entidad, llamándose en sus comienzos ‘Federación de Asociaciones Gremiales’.
Esta Federación tenía como objetivo principal brindar cobertura social a todos los trabajadores, sin hacer distinción en cuanto a su afiliación política ni gremial. Su destino original, sería la creación de una guardería para los hijos de los trabajadores y comedores para estos mismos obreros.
Con el general Edelmiro Farrell en la presidencia de la República, se les concedió a los impulsores del proyecto, en forma precaria, la posibilidad de desarrollar actividades en terrenos situados en calle Nueva York y Valparaíso que pertenecían a la Administración General de Puertos.
En su nueva sede y poniendo de relieve los fines sociales que se perseguían, el doctor Desmarás manifestó en el año 1946 la conveniencia de cambiar la denominación del organismo, que paso a denominarse “El Hogar Social”.
A la vez, se renovaron autoridades y quedó conformado el nuevo consejo superior, que tuvo como dirigentes al propio Desmarás (presidente); Alberto Proia (vicepresidente); Arturo Tosi, Alfredo Quintana, José Elpuerto, José Demario, Espartaco Espaccesi, Lorenzo Finn, Carmelo Silingo, José Inda, Carlos Osorio, Juan Galicia y Raúl Corvalán (vocales titulares).
Como emblema de la nueva institución se eligió una escultura de la artista plástica María Ester Deretich; la obra “Vida”, que simboliza el cobijo de una madre a su hijo, mensaje que precisamente quería transmitir el Hogar Social para sus socios.
Más tarde, fueron seleccionados los colores verde, blanco y amarillo. El blanco simbolizaba la pureza, el verde la vida y el amarillo la fuerza y resplandor de la nueva institución que asomaba.
La entidad contó pronto con servicios médicos, odontológicos y radiología, una guardería, un jardín de infantes y una escuela primaria. A ello se sumaron los dictados de talleres de carpintería, hojalatería, costura, bordado, dactilografía y taquigrafía.
Además contaba con una imprenta, servicio de ambulancia, un cinematógrafo y hasta con un ómnibus propio, que era cedido a otras instituciones que lo solicitaban.
El 25 de octubre de 1947 pasó a llamarse “Hogar Social Coronel Perón”, designación que se mantiene actualmente, aunque cabe aclarar que con el golpe de Estado y la proscripción del peronismo en 1955, hubo que quitar del nombre la alusión a Perón.
En 1948 se comenzó a construir en el Cementerio de La Plata un panteón ‘a perpetuidad’ vendido a socios, que aún hoy, continúa perteneciendo a hijos y nietos de quienes oportunamente lo compraron.
En los salones del Hogar se realizaban bailes que congregaban a familias enteras, se contrataban orquestas y cantantes muy famosos de la época.
Un gran hito lo constituyó el inicio de la construcción de su reconocido natatorio de agua salada, con dimensiones de pileta olímpica. A la vez se avanzaba con la construcción de una pileta de dimensiones reducidas para los más chicos. Eran años de esplendor para la entidad cuya sede oficiaba de portal de ingreso a una calle mítica de un Berisso floreciente.
Ante el alejamiento de la presidencia del Dr. Desmarás, el gobierno envió un interventor con la voluntad de sostener los servicios en marcha. Con el Golpe de Estado de 1955 y una crisis que fue in crescendo, el Hogar Social no podía sino verse perjudicado. Sus instalaciones fueron usadas como caballerizas y eso ocasionó que las puertas se mantuvieran cerradas a otro tipo de actividades.
A fines de 1956, un grupo de socios pudo abrir el club aunque sólo en verano para la utilización de la pileta, sin poder cumplir un rol social importante como lo hacía anteriormente.
Pisando la década del ‘60, el Estado volvió a enviar un interventor que reorganizó nuevamente el club, aunque ya no con el nombre de Perón. Se reabrieron el jardín de infantes y los talleres de oficios y se creó la biblioteca “Francisco Legarra”. También funcionaba una colonia de vacaciones en la época de verano y volvieron las prestaciones de servicios médicos y actividades deportivas.
En el año 1967, asumieron nuevas autoridades, con Juan Regueira en la presidencia, lo que permitió un nuevo impulso. Actividades como tenis criollo y patín se destacaban dentro del ámbito deportivo de la zona.
Por la década del ’70 funcionó en la planta baja del edificio el Banco Cooperativo, además de consultorios médicos, talleres de costura, actividades deportivas. En los meses de verano, el parque con sus parrillas y piletas era visitado por la mayoría de los berissenses, que pasaban las tardes dentro de la institución.
Los ochenta
Desde siempre, el Hogar Social soñó con tener una pileta climatizada. Su idea inicial era comprar una carpa para cubrir el natatorio olímpico, pero la intención se frustró en 1982, cuando no pudo accederse a un subsidio tramitado para ese fin.
Sin embargo, en 1983, con una comisión directiva renovada, liderada por el presidente Oscar Elías y el tesorero Francisco Mengoni, se dio inicio al proyecto de construcción de un natatorio climatizado, totalmente techado, con el fin de no interrumpir la actividad de natación durante el invierno, ya que el nivel de competencia alcanzado por los nadadores del club era altamente satisfactorio.
Pero no fue hasta 1987 y con el empuje de nuevos socios, que se puso en marcha dicha construcción, en un espacio lindero a la cancha de tenis.
En noviembre de ese mismo año, se inauguró la “Guardería Infantil Evita”, lugar que fue cedido en alquiler al Municipio. A su vez, continuaron realizándose otras actividades deportivas, como artes marciales, yoga, vóley, patín artístico y triatlones en época de verano.
En espacios que ya no eran utilizados por los servicios médicos, comenzaron a funcionar entidades como la Asociación Regional de Vóley Amateur, el Club de los Abuelos de la Tercera Edad, la Colectividad Irlandesa, el Centro de ex-combatientes de Malvinas CEVECIM y la Asociación de Entidades Extranjeras. El vínculo con esta naciente institución, que celebró días atrás sus 45 años, posibilitó que las primeras ediciones de la Fiesta del Inmigrante se efectuaran en la sede del Hogar, más precisamente en el salón de planta alta.
Dueños para siempre
Entrada la década del ‘90 y por medio de cenas mensuales, se pudo comenzar a techar la pileta climatizada. Pero una vez más, los embates del destino pusieron una piedra en el camino de las autoridades de la institución.
El gobierno nacional tomó la decisión de poner en venta todos los inmuebles que no reportaban beneficios económicos, con el objetivo de recaudar fondos. Es debido a esto que se pusieron en remate las tierras del Hogar Social.
Dada la circunstancia y la urgencia con que era necesario resolver la situación, el Consejo Directivo se movió rápidamente para poder comprar la sede. El Banco Hipotecario tasó las tierras, e incluso se intentó que no se tuviesen en cuenta las mejoras edilicias, ya que habían sido hechas por los mismos socios.
Finalmente, se tasó a un precio accesible, por lo tanto, ante innumerables gestiones frente al Ministerio de Economía de la Nación y con el apoyo de los diputados Jorge Drkos y Marcelo Bassani, el dirigente comunal Roberto Arún y entidades de Bien Público se pudo concretar la operación. Fue así que en 1993, con sus 50 años recién cumplidos, el Hogar Social finalmente sería dueño del espacio en que se cimentó su sede.
Mientras tanto, continuaron funcionando allí el Concejo Deliberante en el salón de planta baja y otras reparticiones municipales, como Bromatología, Veterinaria, Catastro y Archivos Generales. En el plano deportivo, seguía activa la práctica de natación, vóley, patín, tenis y taekwondo.
En 1995, con el empuje de socios y colaboradores de otra generación, comenzó una nueva etapa para el básquet en el Hogar. Fernando Andino y Alejandro Zubik pusieron en marcha la enseñanza de esta disciplina, que se integró a la Asociación Platense de Básquet con varias categorías: pre-mini y mini utilizaban la cancha propia de cemento, mientras que infantiles y cadetes hacían de local en el Gimnasio Municipal, al igual que la categoría superior, ya que las dimensiones de la cancha propia no eran las oficialmente autorizadas para la actividad. El club YPF había cerrado sus puertas, lo que ocasionó que varios jugadores de dicha institución comenzaran a vestir la casaca verde.
Pileta climatizada y nuevas propuestas
El Consejo Superior continuó trabajando para culminar la obra del ansiado natatorio climatizado y mediante distintos eventos y el apoyo de sus asociados, el ciclópeo proyecto se hizo realidad.
Aprovechando la presencia del gobernador Eduardo Duhalde en Berisso, se inauguró el 2 de octubre de 1996 la pileta climatizada, que permitiría la práctica y enseñanza de natación durante todo el año.
La institución siguió creciendo y se incorporaron otras actividades. A principios del nuevo siglo, el Teatro Popular Berisso comenzó sus ensayos en el salón de planta alta que contaba con un escenario, utilizado también con el mismo fin en la década del ‘50.
Con el aporte del reconocido actor y director ‘Lito’ Cruz, se hizo entrega de un subsidio para el Teatro Popular, poniéndose en valor, aquella sala. El acondicionamiento de camarines, más la instalación de luces y nuevo sonido fueron parte de las mejoras. Durante varios años se brindaron obras de teatro promovidas por el actor y director Walter Zuleta.
Mientras tanto, la Escuela de Guardavidas y el Curso-Instructorado de Natación también se afincaron en el Hogar Social, donde aún continúan con su actividad, permitiendo a muchos jóvenes contar con una salida laboral.
En 2007, ya sin la actividad del teatro, se decidió hacer uso del salón de planta alta, reacondicionándolo para uso exclusivo del básquet femenino, que funcionó como disciplina durante dos años.
A la vez, en el salón de planta baja comenzó a funcionar el único centro de rehabilitación cardiológica de la zona por ese entonces, Ergo Salud, aún en funcionamiento.
Ya comandada por la actual dirigencia, que integran entre otros Luis Tamone (presidente), Leonardo Zanassi (vicepresidente), Eduardo Pendenza (tesorero), Silvana Viera (secretaria) y Nicolás Yansurki (revisor de cuentas) se trazaron nuevas iniciativas.
Bajo esta conducción, se decidió continuar con el proyecto de abrir más espacios y disciplinas. Es por eso que en el año 2011 se realizó la remodelación de la cancha de básquet, con la colocación del piso flotante, algo que se logró gracias a un gran esfuerzo de parte de la dirigencia del club y el incondicional apoyo de las familias del básquet que, comprando un metro cuadrado de piso, hicieron posible la ansiada cancha. La remodelación incluyó el acondicionamiento de nuevos vestuarios, la ampliación del gimnasio, la construcción de tribunas y mejoras en el buffet.
A fines de 2017, las autoridades pusieron en marcha la refacción del techo de la pileta climatizada, que se encontraba en muy mal estado. Un subsidio a nivel provincial no alcanzó para cubrir los gastos, `por eso se decidió encarar el proyecto replicando la iniciativa que se echó a andar para remodelar la cancha, esto es ‘vendiendo’ metros cuadrados de techo a socios, allegados y colaboradores.
Frente a un contexto económico adverso, el club debió esforzarse al extremo para pagar unas tres cuartas partes del costo del arreglo del techo. Esa labor permitió que a mediados del 2018 la pileta pudiera volver a funcionar a pleno, brindando a la ciudad un espacio totalmente renovado.
El presente
El lugar en el que se encuentra emplazado el Hogar Social es de fácil acceso. Incluso llegan al predio las líneas de colectivos 202 y 214.
El gimnasio cuenta con dos canchas de básquet de parquet en la que desarrollan su actividad alrededor de doscientos integrantes de categorías masculinas y femeninas que participan de la actividad de la APB (Asociación Platense de Básquet). Se cuenta con todas las categorías desde Escuelita (mosquitos) a Superior, pasando por Pre-mini, Mini, U13, U15, U17, U19, U21 y U23. También está en plena actividad el Maxi Básquet.
Para reflejar la actividad del básquet, además de ofrecer información acerca del resto de las actividades del club, se generó en los últimos tiempos el canal de streaming “Hogar Crece”, que suele transmitir en directo partidos que el Verde juega como local.
Por su parte, la pileta climatizada, funciona durante todo el año de lunes a sábados, nucleando a más de quinientas personas. Allí también entrena el equipo del Hogar Social y los alumnos del Instructorado de Natación. En los horarios matutinos, la pileta funciona para las escuelas del distrito (CEF y Escuelas Deportivas públicas).
El salón de planta alta es utilizado para la práctica de Patín Artístico, con más de cincuenta alumnas que compiten para el Hogar a nivel regional, provincial y nacional. En el espacio lindero a la cancha de básquet realizan sus actividades las chicas de Acrobacias con Telas y quienes practican Taekwon-do.
En el ingreso sobre calle Nueva York, funcionan en planta baja el gimnasio de Ergo Salud y un gimnasio deportivo. También desarrolla allí su actividad el Centro de Rehabilitación Kinesiológica. Otro de los salones está destinado al dictado de clases de Pilates, Yoga y Gimnasia funcional.
Sobre calle Valparaíso (168) presta sus servicios la Guardería municipal “Evita” y se encuentra también la entrada de la cancha de Fútbol 5. En los meses de verano funciona, como siempre, la pileta olímpica de agua salada y una más pequeña, en un parque con parrillas y una frondosa arboleda.
“A lo largo de la historia, el Hogar Social ha sufrido altas y bajas, tuvo épocas de esplendor y otras no tanto, pero hay un factor que fue clave en todo ese trayecto: sus socios y concurrentes. Gracias a la familia del Hogar y su pertenencia, la institución logró crecer y convertirse en lo que es hoy en día”, afirman por estos días integrantes de la comisión directiva de la entidad.
Luis Tamone, en su rol de presidente, consideró justo destacar el papel fundamental que ocuparon todas las comisiones directivas que estuvieron a cargo. “Todos aspiraron a convertir este espacio en un Hogar, como lo indica su nombre. En lo personal, el Hogar Social se convirtió en mi segunda casa. Allí pasé veranos enteros y conocí muchos amigos. Como lo era antes, lo es ahora, y es debido a esto que invito a todos a que formen parte de la institución. El Club tiene muchas actividades y disciplinas, en las cuales se puede participar, por lo que es imposible no sentirse uno más de la familia del Hogar Social”, afirmó.
El festejo
Este sábado entre las 20:00 y las 24:00, se desarrollará el encuentro mediante el que se conmemorará el 80º Aniversario de la institución. Durante la velada también se entregarán medallas a los deportistas que defendieron sus colores durante la temporada que concluye. El ingreso es por calle Nueva York y los interesados en obtener más información pueden visitar las cuentas del Hogar en redes sociales.
