Durante buena parte de la semana, usuarios de Berisso se vieron privados del servicio de agua corriente. A la situación que se experimentó durante gran parte del lunes y la mañana del miércoles se suma la que se advierte en las últimas horas, con canillas secas y usuarios visiblemente irritados en diferentes barrios.
La empresa ABSA informó que el panorama que ofrece hoy el servicio obedece a la realización de tareas de mantenimiento en la Planta Potabilizadora Donato Gerardi, ubicada en Punta Lara. “Estas intervenciones provocan una disminución en los caudales de agua enviados a La Plata, Berisso y Ensenada, pudiendo generar baja presión en las tres ciudades”, expresaron a través de un comunicado fuentes de la firma, pidiendo que hasta tanto se finalicen las tareas, los vecinos reserven el agua “para usos vinculados a hidratación y quehaceres domésticos esenciales”.
Lunes y miércoles la firma encaró la reparación de una cañería de 750 milímetros que alimenta un importante sector de Ensenada y Berisso.
Las acciones para solucionar el problema que se presentó en la zona de calle Baradero y el Puerto se extendieron más allá de lo previsto el lunes, y se completaron el miércoles por la mañana.
En la primera de ambas jornadas, los usuarios hicieron oír en forma sostenida y por diferentes vías sus quejas por la falta de precisiones respecto del horario en que se restablecería el servicio, que en algunos casos recién se normalizó a última hora de la tarde.
Más allá del episodio puntual y de problemas crónicos que verano a verano afectan a los usuarios, la empresa ABSA emitió a mitad de semana información referida a la situación que podrían generar las elevadas temperaturas combinadas con la falta de lluvias, pidiendo a la población cuidar con celo el agua disponible.
“Estamos ante la segunda sequía más importante de los últimos 60 años y la Provincia atraviesa la menor disponibilidad hídrica desde que existen los registros”, explicaron desde la empresa, advirtiendo que el componente de elevadas temperaturas y sequía prolongada expone a la totalidad de las instancias que componen el servicio de agua potable a un ‘stress permanente’.
Conforme a lo que fuentes de ABSA indicaron, expertos en la materia describieron que la zona núcleo del país, donde se encuentra la provincia de Buenos Aires, “padece la segunda sequía más importante de los últimos 60 años, suceso que implica la menor disponibilidad hídrica desde que existen los registros”.
A la vez, las elevadas temperaturas propias del verano incrementan el consumo de agua profundizando la crisis, en este caso, por una demanda elevada.
Este combo de escasez y alto consumo se replica en las más de 90 localidades en las que ABSA presta servicio. Por eso, desde la firma se subrayó que una forma de disminuir el impacto negativo que las condiciones naturales imponen sobre el escenario descripto, es tomar conciencia a nivel comunitario de la importancia de cuidar el agua.
“Ante este cuadro, es importante que todos restrinjamos todo lo posible los usos no prioritarios del recurso”, expusieron desde ABSA, haciendo alusión a consumos ‘recreativos’, al llenado de piletas cuando no requieren cambio de agua, al lavado de autos o al riego de veredas en el transcurso del día.
Inacción e impotencia
“Otro día más sin una gota de agua”, se queja entre los usuarios afectados Mercedes, de la zona de Santa Teresita. “ABSA y su interminable reparación que termina como resultado peor o igual de deficiente servicio; días de mucho calor, agua embotellada carísima; obras de construcción hace 4 días paradas; pérdidas económicas para nuestros bolsillos ya muy dañados por la inflación”, enumera para describir el cuadro de situación.
A la vez, cuestiona la ‘inacción’ del gobierno municipal, exigiendo que “intime a la empresa a que arbitre los medios necesarios para que los ciudadanos de Berisso tengamos el suministro básico” y poniendo de relieve que la situación genera “una gran impotencia”.
