Un hombre identificado como Fernando André Sabag Montiel, brasileño de 35 años, fue arrestado en la puerta del domicilio de la vicepresidente Cristina Fernández, tras apuntarle con un arma a pocos centímetros de la cara.
El episodio, que sigue ocupando un lugar preponderante en escenario del debate público, generó en lo inmediato una uniforme condena al ataque, que en la ciudad se tradujo en las voces de oficialistas, opositores y representantes de numerosas entidades de diversos ámbitos.
Con el correr de los días y mientras avanza la investigación para esclarecer el hecho, nuevas discusiones fueron surgiendo en terreno político. La divergencia fundamental tiene que ver con el acuerdo o desacuerdo respecto de la interpretación que horas después del atentado esbozaron el gobierno y sectores afines, quienes definieron el hecho como producto de un ‘discurso de odio’, por el que responsabilizaron a la prensa, la justicia y la oposición, entre otras instituciones.
Repudio del Concejo
Si bien por diferentes vías ya se habían pronunciado respecto del hecho, los representantes del Frente de Todos en Concejo buscaron darle un sesgo institucional al repudio, convocando a una sesión extraordinaria que se concretó el lunes.
En reuniones previas que se dieron hasta minutos antes de la hora pautada para la sesión, se buscó consenso para que oficialismo y oposición pudieran acordar la redacción del pronunciamiento. Luego de la labor parlamentaria y sin llegar a acuerdos, se presentaron dos proyectos de Resolución bajo el mismo título: “Repudio por el intento de Magnicidio sufrido por la vicepresidente de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner”.
Con la presencia de la totalidad de los ediles y un recinto de sesiones colmado de militantes, concejales de Ensenada y funcionarios de la gestión comunal, la asamblea extraordinaria comenzó con el izamiento a la bandera.
Antes de que comenzara el debate, el concejal Alejandro Paulenko se descompensó, siendo asistido rápidamente por compañeros de bancada. De inmediato, la presidente del Cuerpo, Martina Drkos, pidió un cuarto intermedio para que el edil pudiera ser compensado por personal del SAME. Finalmente, minutos después Paulenko se retiró por su propios medios acompañado por personal de salud.
Tras el cuarto intermedio, comenzaron las exposiciones de los concejales. El primero en hacer uso de la palabra fue el presidente de bloque PJ – Frente de Todos, Gabriel Marotte, leyendo un documento presentado por la bancada oficialista junto al bloque unipersonal del Frente Renovador.
“Este documento resume la intención que tenemos de expresar nuestro más enérgico repudio a los hechos ocurridos el día jueves. No estamos ante un hecho aislado perpetrado por un desvariado o alguna persona que lo decidió desde su soledad, como lo han querido instalar en estas últimas horas”, sostuvo Marotte.
También lamentó no haber podido acordar con la oposición el texto de un documento único. “Lamentablemente no tenemos síntesis en algunas cuestiones, pero sí quiero recalcar el aprovechamiento político que hemos vivido pocas horas después del intento de magnicidio. Poco ha servido este intento de asesinato para que reflexionen algunos. Tenemos que aprender de este hecho y si no tenemos la capacidad de hacerlo, que quede bien en claro de qué lado estamos nosotros y en qué lado están los que pregonan el odio y la muerte. Siempre vamos a estar del lado del amor. Nunca más a hechos de violencia de esta magnitud y nuestra conductora sabe que tiene un pueblo atrás para defenderla”, señaló.
Nadina Brizzi agregó que en reiteradas ocasiones el Frente de Todos exigió el cese de ‘expresiones de odio’ y sumó en este sentido críticas a los medios de comunicación concentrados, entendiendo que batallaron contra la denominada ‘Ley de Medios’, generando un clima para la ‘escalada de mensajes violentos’.
“Un odio que se instala para tapar los verdaderos intereses económicos de un pocos a costa del empobrecimiento de todos. Bolsas mortuorias, simulacros de linchamiento, el ‘maten a la yegua’. Hablamos del odio como si cayera solo: este es un plan sistemático que tiene como agoreros a los representantes de la patria financiera, avalados por un poder judicial corrupto. ¿Nosotros somos el odio? El peronismo no se puede anular y hoy se sintetiza en la memoria de Cristina”, pronunció la concejal.
Llegado su turno, la presidente de la bancada Juntos, Silvina Di Renta, expresó el repudio del sector al atentado, aunque haciendo alusión a las diferencias con el oficialismo respecto del mensaje que debería haber contenido un documento compartido.
“Lamentamos que este documento que armamos no haya tenido unanimidad de criterios, que no se hayan tenido en cuenta las modificaciones que propusimos para poder consensuar este repudio que nos interpela a todos. Las modificaciones no cambiaban el espíritu, que es el repudio a lo sucedido y el pronto esclarecimiento. Desde un primer momento fuimos de las fuerzas políticas que repudiamos lo acontecido: repudiar la violencia como método y práctica política. Condenamos este atentado gravísimo contra la Vicepresidente, exigimos que se haga justicia y se esclarezcan los hechos. Todo atentado contra un vicepresidente es un atentado contra la democracia. Esperamos que este hecho gravísimo no sea utilizado con un objetivo de generar más divisiones, más violencia o convertirse en una tribuna para atacar a la oposición política”, pronunció.
Los militantes y dirigentes del Frente de Todos movilizados al recinto no tardaron en hacer sentir su reprobación, increpando a los opositores al grito de ‘traidores’ y entonando el consabido cántico referido al ‘kilombo que se va a armar si la tocan a Cristina’.
Con la merma del griterío se escucharon los mensajes de los concejales Miriam Larrañaga y Antonio Ligari por el oficialismo y Matías Nanni por la oposición, quien pidió que la discrepancia y la diferencias ideológicas no se diriman con violencia y recordó la foto emblemática del gobernador peronista Antonio Cafiero respaldando al presidente Raúl Alfonsin luego del levantamiento carapintada del 16 de abril de 1987.
“Provengo de un partido político que siempre luchó por las instituciones, que sufrió tres golpes de Estado, que luchó por los DDHH y estoy convencido de aceptar las diferencias del quien piensa distinto. Hay una responsabilidad de todos los partidos políticos, porque se ve constantemente cómo se alimentan mensajes de odio de uno y otro lado. Esto no lo podemos permitir”, señaló el radical. “Quiero ser parte de una generación que termine con la intolerancia y la falta de respeto, que se ponga a debatir de verdad los problemas de la gente y la visión de país que queremos. Hoy es un punto de inflexión donde nos tiene que llamar a toda la dirigencia política a poder sentarnos y tener puntos en común y parar con esa grieta que no sirve”, sentenció luego. Hasta ahí, el bloque opositor estaba completo, pero el concejal Pablo Swar se retiró de la sesión y no volvió a ocupar su banca.
“Cristina representa derechos adquiridos, el amor y beneficios sociales y culturales que hicieron cambiar el destino del país después de tantas épocas”, dijo Vanesa Queyffer. “Eso significa Cristina para nosotros, por eso el pueblo salió a la calle. No se puede contra lo que piensa el pueblo, que sigue en la calles. Lamentablemente, esto que pasó no cerró ninguna grieta. La oposición política de nuestro país no estuvo a la altura de las circunstancias. Se mencionó a Alfonsín y cuando él tuvo un golpe de Estado, quien estuvo al lado de Alfonsín fue el máximo dirigente del peronismo. Cuando pasó lo de Cristina, los máximos dirigentes de la oposición no se pronunciaron y no estuvieron a la altura de las circunstancias”, consideró.
Por su parte, el concejal del Frente Renovador Agustín Celi advirtió que el atentado fue, además de contra una referente del Frente de Todos, contra la democracia. “Miles de personas llenamos Plaza de Mayo movilizados por el amor. Nuestra tarea es no permitir más discursos de odio desde la dirigencia política, desde los medios de comunicación. No aceptamos la violencia y el odio”, estableció.
Una postura similar reflejó la concejal del Frente de Todos Marcela Herrera, calificando al hecho como un punto límite y de inflexión que ‘invita a reflexionar’.
Por último, se escuchó a la concejal opositora Mariana Astorga. “Aquellos que venimos de una formación ideológica, humanista y cristiana, siempre vamos a repudiar la violencia. Lo que le pasó a Cristina es un problema institucional, de representación y de querer ir contra la política. La paz social se construye de la acción de cada uno de nosotros frente a los hechos que vivimos a diario, además de este repudio que es necesario”, aclaró.
A modo de respuesta a algunos planteos previos, invocó la responsabilidad de los dirigentes para no agraviar al que ‘piensa distinto’. “No podemos tolerar que si nosotros queremos ser conductores de la paz, se utilicen bancadas o cargos para decirle al otro ‘payaso’ o insultar al que piensa distinto. Eso no es construir la paz”, apuntó. “Se mencionó la falta de la oposición en este repudio pero el repudio fue automático. No hubo desde la institucionalidad, del señor Presidente, una convocatoria a todos los sectores. Él decidió transformarlo en un feriado y en un acto partidario. La imagen de Cafiero y Alfonsín todos la recuerdan; ahí ningún sector dudó respecto de la convocatoria y de repudiar los levantamientos. No le pidamos al otro que se transforme en un constructor de la paz si nosotros mismos no tenemos capacidad para hacerlo”, dijo parafraseando a San Francisco de Asís.
Finalmente, en la votación se impuso 12-6 el expediente presentado por la bancada oficialista.
