En su presentación ante la UFI en turno, Martín Idiart (SIGUR), advierte que podría tratarse de una 'represalia' frente a sus denuncias de persecución gremial en el ámbito comunal.
Martín Idiart, secretario general de SIGUR Berisso, sindicato que aglutina a guardavidas locales, denunció el fin de semana que su automóvil fue blanco de un ataque vandálico, que no dudó en catalogar como una represalia por las denuncias de ‘persecución gremial’ que el gremio hiciera públicas recientemente.
El hecho, conforme a la presentación efectuada en las últimas horas por Idiart ante la UFI en turno, se produjo mientras el auto permanecía estacionado en la vereda de una propiedad ubicada en la Manzana 7 del Barrio Obrero local. El guardavidas desestimó que se haya tratado de un intento de robo, teniendo en cuenta que nadie tocó los elementos a bordo del vehículo, entre los cuales se encontraba incluso una billetera.
En su presentación, el denunciante pide que la investigación contemple, además de las correspondientes pericias, la búsqueda de testimonios de vecinos de la zona, incorporando además el registro que haya tomado la cámara del sistema municipal de seguridad pública ubicada en Avenida Mitre y Manzana 7 del Barrio Obrero, justo en la esquina del lugar en el que estaba estacionado el vehículo.
Conocido el hecho, la Federación Argentina de Guardavidas (FAG) emitió un Comunicado, a través del que advirtió que “estas prácticas nos retrotraen a las peores épocas que vivimos como sociedad y que no queremos repetir jamás”. Del mismo modo, pidió a las autoridades competentes investigar los hechos y aseguró que, lejos de generar temor, la situación alienta a la Federación y los gremios que la integran a ‘seguir defendiendo la profesión y a sus trabajadores’.
