El temporal que afectó a la región el miércoles a la noche y que provocó en varios puntos de la ciudad la interrupción de servicios de luz y agua, también dejó sus secuelas en Isla Paulino. Las fuertes ráfagas no sólo ocasionaron destrozos en cultivos y la voladura de techos sino que además terminaron derribar el histórico semáforo fluvial instalado en el lugar.
En diálogo con el Semanario, el Coordinador municipal de Isla Paulino, Germán Salmen, contó que la caída de la añeja instalación se produjo hacia las nueve de la noche, pocos minutos después de desatado el temporal. «Por lo que pudimos relevar, la intensidad de las ráfagas sobre la escollera alcanzaron los 148 kilómetros por hora, más que significante para tirar abajo cualquier cosa», comentó.
Entre los inconvenientes náuticos que se registraron, Salmen mencionó también el ‘desprendimiento de la amarra del dique seco’, una pesada armazón de hierro que permite el ingreso de las embarcaciones. «La estructura se soltó y quedó flotando en el ingreso de la escuela naval», relató, agregando que además de ese episodio se registraron serios daños en quintas y hasta el hundimiento de algunas lanchas.
Consultado acerca de cómo revertir los efectos citados, el funcionario manifestó que en el caso del semáforo, su restitución ‘costaría mucho dinero’. Respecto de los daños en tierras productivas, indicó que se buscará allanar el camino para que los isleños perjudicados puedan acceder a algún subsidio.
Al tomar conocimiento de lo sucedido, el presidente de la comisión de Cultural del Concejo Deliberante, Maximiliano Barragán, estableció contacto con la Coordinación de Patrimonio, para tratar de iniciar acciones orientadas a la restitución del que definió como un bien cultural de la ciudad. Mediante un escrito, el edil recordó además las distintas funciones que tuvo el semáforo desde su instalación en el año 1908.
