Entre las actividades ligadas al ámbito de la salud, la de los odontólogos es sin dudas una de la que más expone a los profesionales a potenciales contagios de Covid. Es por eso que, desde que el virus comenzó a diseminarse por el territorio nacional, la actividad del sector se debió limitar a la atención de urgencias, tales como traumatismos y dolores agudos e infecciones, entre otras emergencias.
“Por nuestro contacto con la boca de los pacientes estamos más expuestos a la probabilidad de contagiarnos, por eso las medidas de seguridad que implementamos son más estrictas”, expresa el Dr. Mauro Mosquera, presidente de la Agremiación Odontológica de Berisso, La Plata y Ensenada.
Para recibir a cada nuevo paciente, los odontólogos deben desplegar una serie de medidas como ventilar el consultorio y desinfectar, además de colocarse cubre-botas, camisolín, máscaras especiales y cofias.
Todo ese procedimiento, explicó Mosquera, se repite cada vez que ingresa al consultorio una nueva persona, a quien también deben brindarle los elementos para su desinfección y para su protección personal.
A estos gastos extra que deben afrontar los profesionales del sector se suma otra problemática: el retraso en el pago por parte de las obras sociales.
“Si tenemos en cuenta que los insumos están dolarizados y que los pacientes también sufren el impacto de la crisis económica, el hecho de que se retrasen el pago de nuestras prestaciones agrava más la situación”, explica el odontólogo.
Para paliar la situación, desde la entidad se realizaron convenios con distintos bancos para que los agremiados puedan acceder a la compra de insumos descartables en seis cuotas, y a otros materiales necesarios, en este caso en tres cuotas.
“Somos conscientes de que al ser la especialidad de mayor riesgo vamos a volver en último término a la normalidad. Por eso esperamos que en la cadena de pagos se respeten los plazos habituales”, indica Mosquera.
