Nacido en el año 2000, el juvenil defensor entrena con la sub-20 nacional. En los últimos días fue spárring de sus grandes ídolos de la Selección Mayor.
Nacido en el año 2000, el juvenil defensor de Gimnasia y Esgrima La Plata Néstor García Martinoli se convirtió en una de las revelaciones de las inferiores de su club, razón por la que fue convocado a sumarse a las prácticas de la Selección Argentina Sub-20.
La convocatoria del DT Sebastián Becaccece generó alegría en la ciudad, teniendo en cuenta que el futbolista no sólo es berissense, sino que además transitó por las infantiles de Estrella entre 2006 y 2008.
Defensor central y capitán de la Sexta de Gimnasia, García Martinoli trabajó durante los últimos días en el predio que AFA tiene en Ezeiza.
“El martes por la noche, después que volví del gimnasio, encontré que tenía muchas llamadas perdidas. Me llamaba Marcelo Ramos, el coordinador de Gimnasia, para decirme que al día siguiente tenía que presentarme a las 9 en el predio de la selección en Ezeiza, para entrenar con la Sub 20”, narró el futbolista a inicios de esta semana. “Para mí fue una sorpresa increíble y para mi familia una emoción total. También recibí muchos llamados y las felicitaciones de la gente del club”, continuó con entusiasmo.
También se refirió a los primeros días de entrenamiento en Ezeiza. “Es algo hermoso, difícil de explicar con palabras. Nos dieron libre el domingo libre y el lunes otra vez a entrenar y hasta tuve la posibilidad de ser sparring de la selección mayor”, mencionó, subrayando que compartir el mismo campo con sus ídolos es “un sueño increíble” del que no quiere despertar.
“Todavía creo que no dimensioné en su totalidad lo que me está pasando, pero sí lo disfruto mucho. También es una felicidad enorme para la gente que me quiere” contó, después de marcar en la cancha ni más ni menos que a figuras como Lionel Messi.
Tras revelar su grato recuerdo por los inicios en Estrella, club al que definió como ‘una gran familia’, sostuvo que su objetivo ahora es ‘mantener los pies sobre la tierra’.
“Ahora trato de pensar con serenidad, pese al momento. Trato que la euforia no me haga perder el rumbo. Todo lo que logré hasta aquí fue con mucho esfuerzo y tengo que seguir así, por mi club y por la Selección”, estableció.
En ese plano, observó que su familia es un gran sostén. “Siempre me ayudó en todo, sobre todo en los momentos duros”, precisó, dedicando un momento a agradecer a sus orgullosas abuelas, a su mamá Marta, a su papá Claudio, a sus hermanos Ignacio y David y a su novia Agustina. En esta especial circunstancia, también quiso expresar las gracias a la gente de Estrella y de Gimnasia, a Evangelina Martín y a tantos amigos cosechados en Estancia Chica y El Bosquecito.
