En una visita enmarcada en las cercanas elecciones de autoridades de la UCR, el dirigente aseguró que el partido “está imbuido de un espíritu popular".
El mapa radical se divide en dos ramas principales en la provincia de Buenos Aires. Lanzadas las candidaturas para la elección de autoridades del Comité Provincia, prevista para el 21 de marzo como la elección de autoridades de los diferentes comités bonaerenses, un grupo de radicales berissenses referenciados en “Evolución Radical” acompaña la candidatura de Gustavo Posse. Junto a dirigentes históricos del partido, la apuesta del sector es dar paso a una ‘renovación partidaria’, premisa con la que también comulga el dirigente Federico Storani, quien el lunes visitó el distrito para ofrecer una charla sobre su visión en torno al futuro partidario.
“Estamos convencidos de que a pesar de la situación extremadamente grave que estamos viviendo, la de una pandemia, que nos golpea a todos y nos hace vulnerables, es imprescindible que algunas actividades no deben interrumpirse: entre ellas la política y sobre todo la que busca la renovación”, definió inicialmente el visitante. “Se ha instalado que la política no sirve, que está para la ‘repartija del queso’, para ‘salvarse’”, presentó para referirse a la participación política como una herramienta para que los problemas argentinos algún día tengan solución.
Para el dirigente radical es vital recuperar el significado de ‘hacer política’, aunque con gente ‘que tenga valores’. “Nosotros creemos que la política es servicio y no es una frase, sino que nos inspiramos en la simbología e historia que tiene el radicalismo. Queremos recuperar ese espíritu y a partir de de esa premisa, hemos hecho una síntesis que expresa Gustavo Posse en la provincia encabezando la lista 14 y algunos referentes históricos como Juan Manuel Casella y mi caso, que estamos acompañando”, enunció. “Además tenemos una figura promisoria que completa esa síntesis, que es la de Martín Lousteau, que tiene mucha llegada a los jóvenes, que hace críticas duras al gobierno, pero que también propone alternativas y trata de superar la grieta para buscar denominadores comunes en la sociedad argentina”, añadió para completar el esquema.
“La elección del 21 de marzo es toda esta síntesis a la que hago referencia. Significa volver a llevar a un radicalismo con su identidad y valores a liderar un espacio más amplio. Hablamos de la proyección nacional, pero con valores socialdemócratas como los que abrazaba Raúl Alfonsín, no con posiciones como las que han sumido al partido como furgón de cola de un proyecto conservador, que es lo que expresa el PRO”, advirtió.
El ‘cambio de paradigma’ que pretende el sector dentro de la UCR fue el tema eje de la charla que ofreció al grupo de correligionarios que se dio cita en la sede partidaria.
“Hay que seguir construyendo con amplitud, pero lo que reclamamos por historia los que estamos en esta porfía, es el liderazgo. El propio Alfonsín construyó de manera amplia: tuvo peronismo, socialismo, pero gobernaba el radicalismo. Ése espíritu queremos recuperar. Amplitud con una orientación bien clara de sensibilidad social, de poner el énfasis en la educación y la salud pública, en la cual tenemos sobrados antecedentes”, argumentó Storani.
Con fuertes críticas a la actual conducción partidaria, aseveró que el el partido debe ser un espacio ‘de puertas abiertas’, en el que ‘no sólo se discutan los cargos’.
“Le llevábamos decenas de iniciativas al presidente del Comité Provincia Daniel Salvador y nos decía que no quería hacer ola porque tenía temor de no estar en la formula con Vidal. Lo pusieron, pero igual fue un fiasco porque no cumplieron con las expectativas”, expresó con dureza, apuntando también con sus críticas a Maximiliano Abad. “Nuestro adversario en estas internas es actualmente el presidente de bloque de Diputados y no lo conoce nadie por las iniciativas en favor del pueblo”, aseveró.
“El radicalismo tiene que volver a recuperar la calle, tiene que ser un partido de puertas abiertas, ser receptor de las inquietudes para transformarlas en propuestas y terminar con esto de ‘me quedo contento con ver que carguito me dan’”, remató.
El histórico dirigente aseguró que el radicalismo se prepara en esta nueva etapa ‘para ser protagonista’ y que con ese fin se trabaja en la construcción de un esquema capitaneada por un candidato propio.
“No lo digo ahora especulando con una interna. Lo expresamos en las elecciones pasadas y no nos permitieron ir con la candidatura de Martín Lousteau para competir por la presidencia. En ese momento recibimos una negativa porque había un liderazgo que era el de Macri, a lo que contesté que era líder del PRO, pero no nuestro”, puso de relieve el ex-diputado nacional y ex-ministro del Interior.
“Nosotros queremos que en el Frente haya un debate de cara a la sociedad y que cada fuerza presente un candidato, que la gente exprese su preferencia y ordene las listas: para eso se hicieron las PASO. Hay que usarlas como marca la ley, para evitar que entre tres o cuatro decidan y hagan actos de nepotismo. El ejemplo fue Salvador, que metió al hijo en la lista de diputados nacionales sin que tengan ningún tipo de antecedente”, expuso además, reiterando sus críticas al ex-vicegobernador.
“Lo que queremos es democracia. En el ADN, en la genética del radicalismo, está la democracia. Queremos además ser el principal estandarte del frente, con una propuesta socialdemócrata, progresista, mucho más conforme a los valores que históricamente Alfonsín y el radicalismo han representado. El radicalismo está imbuido de un espíritu popular, no somos un proyecto conservador”, concluyó.
