Continúa en el ámbito de la Orquesta Escuela la incertidumbre respecto de la designación de los profesores que deberían incorporarse al proyecto para cubrir bajas de los últimos meses.
Desde la coordinación del proyecto se recordó que la documentación solicitada ‘volvió a presentarse’ el último jueves en horas de la mañana, señalando que hasta ayer ninguno de los profesores a incorporarse fue convocado para iniciar su actividad.
“El primer nombramiento responde a una baja del mes de julio de 2017. Se reclamó con número de expediente de renuncia, expediente de solicitud de alta en septiembre de 2017 y todavía no hubo resolución”, señalaron integrantes del equipo de trabajo.
Por otra parte, subrayaron que los otros 6 nombramientos ingresaron por Expediente de la Dirección de Cultura en diciembre de 2017. “En cada una de los encuentros realizados con las autoridades municipales vuelven sobre la documentación: nuestro trabajo y los chicos tienen un tiempo distinto de las respuestas burocráticas”, plantearon al respecto, indicando que tampoco hay definiciones acerca de las horas de guitarra para la continuidad del profesor (con menos de la mitad de su carga horaria) que atendía alumnos en el CIC, la EP 25, la EP 19 y la EP 7.
Finalmente, aclararon que de la cantidad de profesores provinciales 28 de ellos tienen menos de 10 módulos semanales, mientras que de los agentes municipales, 15 están nombrados por 1 hora semanal. En igual condición, advirtieron, se encuentran 3 de los 7 nombramientos pendientes. Con ese personal se cubren 15 núcleos en Berisso, talleres y clases de violín, viola, cello, contrabajo, flauta traversa, clarinete, oboe, fagot, trompeta, trombón, corno, bombardino, percusión sinfónica, percusión latinoamericana, lenguaje musical, coro y guitarra, a los que se suman talleres de fila y práctica orquestal de núcleos y de las formaciones inicial, banda, prejuvenil, juvenil, precamerata, ensamble de vientos, camerata y ensamble de guitarras.
“Nuestra energía tiene que estar concentrada en la música, en el crecimiento de este proyecto inclusivo e integrador, que apunta a seguir despertando vocaciones en los chicos que por lejanía no tienen acceso a una formación musical”, plantearon responsables del proyecto al referirse a las vicisitudes burocráticas y económicas a las que aluden.
