Corría la tarde del sábado y con una performance que entusiasmaba a sus seguidores, Villa San Carlos le ganaba 2 a 0 al puntero Los Andes en el Gennacio Sálice por la décima fecha del Apertura de la Primera B.
Lo que pintaba para una fiesta del Celeste, a partir de los goles de Octavio Padovani a los 8 minutos y de Alexis Alegre a los 13 se desdibujó en el entretiempo, no por lo que pasara dentro del campo de juego, sino por incidentes que se registraron en inmediaciones del estadio en el entretiempo.
Más allá de las versiones que circulan en diferentes sentidos y al grado de pasión y parcialidad con el que se evalúen los hechos, el trascendido más firme que circuló un rato después del episodio que llevó al árbitro Julián Jérez a suspender el partido fue que seguidores de la Villa a los que se impuso derecho de admisión por incidentes en la popular del Gennacio Sálice semanas antes atacaron a piedrazos a personas que -en un número inusual, teniendo en cuenta que los partidos siguen jugándose sólo con público local- acompañaban a la delegación de la visita. Versiones posteriores, que también deberán cotejarse con el respaldo de testimonios y grabaciones en video que puedan aportarse, hablaron de cierta inconducta de los allegados-hinchas del ‘milrayitas’, en minutos previos al partido.
Más allá de la conclusión que arroje el informe, el operativo de seguridad montado para garantizar la tranquilidad de la jornada no cumplió su cometido y nuevamente una jornada para disfrutar del fútbol se transformó en un hecho policial.
Habrá que esperar ahora el veredicto de quienes tienen la responsabilidad de juzgar los hechos para conocer si institucionalmente al local le cabe alguna sanción y, ya en el plano futbolístico, qué cierre se le buscará dar al partido, que probablemente se complete en unos días a puertas cerradas.
