Salones de fiestas y emprendimientos afines resultaron de los más castigados por las restricciones que impuso la pandemia. En ese contexto, que todavía les impide el retorno a la actividad, la semana que viene tienen previsto realizar una concentración a nivel provincial en La Plata con el objetivo de hacer visible el problema y reclamar respuestas al gobierno.
Convocada por la Agrupación Propietarios de Salones de Fiestas y Afines (APSFA) de La Plata, con la adhesión de propietarios de otras localidades provinciales y demás actores del rubro, la concentración será el miércoles 3 a las 10:00 en la zona de 7 y 50, con réplicas en sitios céntricos o emblemáticos de ciudades como Bahía Blanca o Mar del Plata.
Fuentes del sector manifestaron que la esperanza que abriga esta convocatoria es conseguir que las autoridades contemplen la angustiante emergencia en la que se encuentra el sector, para dar curso a algunas medidas que posibiliten su resurgimiento.
“Como es de dominio público, el sector cerró sus puertas el 15 de marzo del año pasado. Desde esa fecha, sólo hemos generado deudas. Un relevamiento realizado en el mes de noviembre indica que el 50% de los establecimientos ha decidido cerrar definitivamente, al no poder atender los gastos originados por ejemplo por el pago de alquileres de los salones e impuestos”, observaron emprendedores del rubro.
La tendencia también se observa en dimensiones similares en Berisso, en donde fuentes del sector advirtieron que de unos nueve salones, cuatro ya decidieron bajar la cortina definitivamente, mientras el resto ensaya alternativas para tratar de expandirse a otras modalidades que les permitan mantenerse a flote y otros enfrentan aún la transición de intentar reprogramar fechas y en muchos casos devolver anticipos recibidos en la calidad de reserva de los salones.
El desgaste experimentado por el sector afecta a titulares como trabajadores de cientos de salones, casitas y/o peloteros hoy cerrados. También cercena la posibilidad de trabajar a numerosos emprendedores independientes, que se sustentan ofreciendo su arte, talento y oficio a los shows y atracciones que los salones suelen ofrecer. En ese campo, también se ven notablemente afectados animadores, integrantes de servicios de cocina y de limpieza, mozos, DJ’s, etc.
“La intención de la convocatoria del 3 de febrero es poner a la vista de las autoridades que podemos trabajar y garantizar eventos seguros, con protocolos basados en normas y leyes en seguridad e higiene”, señalan desde la agrupación platense. “Necesitamos que las autoridades provinciales nos reciban y nos expliquen por qué somos los únicos que no podemos trabajar. Por qué es seguro festejar un cumpleaños en un bar o restó y no en un salón”, añaden.
En el mismo sentido, observaron que mientras se permite que mucha gente esté bajo el techo de un casino, bingo o cine, o en hipermercados y grandes y pequeñas superficies comerciales, “parece solamente preocupar la circulación en el interior de un salón”.
El petitorio que se elevará el miércoles a las autoridades incluye, entre otros, los siguientes ítems: que se otorgue un subsidio para el rubro; que se declare la emergencia económica para todo el sector; que se exima a los emprendimientos del pago de impuestos y monotributo, así como del pago de servicios. “Tenemos las térmicas bajas y siguen cobrándonos igual”, cuestionan amargamente quienes se manifiestan decididos a ensayar las últimas maniobras para que la actividad no desaparezca, más allá de las nuevas condiciones que la pandemia ya parece haber fijado a futuro.
