Como resultado de una conciliación penal, tres jóvenes de 18 y 19 años que habían pintado graffitis en el frente de Casa de Cultura, iniciaron acciones para restablecer el daño cometido pintando la fachada del histórico edificio, para lo que aportan materiales y mano de obra.
Hugo Dagorret, Subsecretario municipal de Seguridad Ciudadana, describió que la causa se inició luego de que los chicos efectuaran sus pintadas y fueran identificados al revisar imágenes de las cámaras del sistema público.
“Este procedimiento es novedoso para la ciudad. Es una herramienta de conciliación penal que ofrece la justicia y permite que quienes cometieron un daño de este tipo lo reparen”, señaló el funcionario.